Cuando se empieza un proyecto debemos tener en cuenta algunas cosas para el buen funcionamiento de la cocina que el cliente final va a agradecer.
Dividir la cocina en zonas nos permitirá tener un espacio para cada función. Muchas de las tareas que se realizan en la cocina necesitarán la utilización de más de un espacio, por lo que es importante situarlos de manera correcta.
- La zona de cocción:
Tal vez sea la zona en la que más se piensa cuando empezamos un proyecto, ya que será donde realizaremos gran parte de la preparación de alimentos. Normalmente la zona de cocción está ubicada en la encimera, aunque no siempre tiene que ser una encimera convencional, actualmente se está llevando mucho poner una isla o península en la cocina en la que podemos instalar la zona de cocción.
- Zona de lavado:
Recuerda que la zona de lavado no solamente va a servir para lavar los platos, también se utiliza el agua por muchas más cosas como, por ejemplo, limpiar verduras y poner el agua en la olla con la que las vas a hervir. Un consejo útil es que la zona de lavado esté junto a la zona de cocción, será mucho más práctico para el usuario.
- Zonas de almacenamiento:
En este punto vamos a distinguir entre diferentes tipos de almacenamiento:
- Almacenamiento de utensilios:
El almacenamiento de ollas, platos, vasos y otros elementos que vamos a utilizar casi a diario es bueno tenerlos almacenados en una zona de fácil acceso. La organización en la cocina es esencial para que las tareas nos resulten ágiles y fáciles.
Una vez tengamos claro en que sitio van a ir los suministros de agua y gas o corriente para las otras dos zonas de la cocina que hemos descrito anteriormente, será más fácil ubicar los armarios y cajones destinados a almacenar los utensilios de la cocina.
Un buen consejo es intentar aprovechar al máximo el espacio del que disponemos y conseguir que sea cómodo acceder a todo lo que tenemos guardado. Para ello podemos utilizar muebles rinconeros extraíbles, cajones cuberteros que dispongan de freno y muebles altos con apertura fácil.
- Almacenamientos de comida:
En este punto hablamos concretamente de la comida que no requiera refrigeración. En muchas ocasiones se destina la función de almacenamiento a uno de los armarios de los muebles altos de la cocina, una buena opción si queremos guardar pocos productos, pero si lo que queremos es tener nuestra pequeña despensa, podemos disponer de una zona con columnas preparadas para este uso.
- Almacenamiento con refrigeración:
Habitualmente vemos como se instala la nevera al lado de la zona de almacenamiento en columnas, pero si se trata de un proyecto distinto, y algo innovador, podemos optar por cajones refrigerados instalados directamente entre los muebles bajos.
- Zona donde estar o comer:
Por último, siempre que la cocina lo permita por espacio, es aconsejable tener una zona en la que comer o simplemente en la que estar.
La cocina se ha convertido en uno de los lugares más concurridos de la casa, en ella no solamente se prepara la comida sino que es un lugar de reunión. Un espacio zona en la que poner una mesa, unas sillas o incluso alguna butaca en la que estar cómodos.
Si deseas más información no dudes en ponerte en contacto con nosotros.